sólo hay una

sólo hay una. pero la de cada uno es distinta. la mia; la mejor. mientras cada uno piense eso de la suya todo estará solucionado. pero, por desgracia, no todos podemos afirmar lo mismo, los que lo hacemos sabemos que la suerte que tenemos es infinita, incomparable con cualquier otra suerte posible en esta vida llena de durezas.
la mia es increible. sus sonrisas son constantes, su fuerza es inagotable, por muy dura o ardua que sea la subida, por muy cansada que esté nunca deja de luchar, no he visto nunca en ella ni un ademán de dejar la lucha, ni una queja derrotista, simepre saca fuerzas de flaqueza dándonos una lección inolvidable a todos loos que tenemos la suerte de vivir cerca de ella.
cuando está hay paz. cuando no está la casa se encuentra vacía, todos esperamos su llegada, su presencia, sus palabras. todos dependemos de ella. la unión perfecta entre nosotros no es posible sin ella, es el centro de esas relaciones.
sus palabras excasean, sus memorias son desconocidas por nosotros, ella vive en el presente. el pasado es para ella una gran fuente de experiencia utilizada de la mejor manera posible.
sus ojos oscuros son los más pacíficos, los más luchadores, los más revolucionarios que he conocido. luchan cada mañana por un fin concreto, luchan cada día por sacar adelante su familia, por que sus hijos sean lo mejor que pueden ser, se realicen máximamente como personas. cada mañana con su actuar nos anima a tener el amor como centro de nuestras acciones, como sentido de nuestras vidas, como unión con las demás personas con las que convivimos cada jornada. ella nos invita, con su ejemplo, a querer a Dios y a los demás. son pocas sus palabras y muchas y silenciosamente heroicas sus acciones.
desconozco su infancia, su adolescencia, su juventud...únicamente conozco pequeños actos o historias que me han contado personas que han estado a su lado en esas épocas de su vida en las que yo aún no existía. pequeños detalles que hacen que pueda hacerme una idea de la gran persona que tengo como madre.
no quiero olvidar ninguna de sus palabras. no quiero dejar nunca de contar con ella. si a alguien quiero parecerme, es a ella. fuerte, tranquila, dinámica, luchadora, optimista.
nos enseña cada día lo más iportante de esat vida: nos enseña a querer. a luchar, a disfrutar de la vida y de la lucha diaria. es la persona más optimista que conozco, optimista en las dificultades a pesar del dolor y de las lágrimas.
no conozco a todas las madres, pero no dudo que pocas son como la mía. capaz de enseñar a amar con el ejemplo diario.
madres sólo hay una.

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