pequeñas cosas

Son aquellas pequeñas cosas que nos dejó un tiempo de rosas, que nos hacen que lloremos cuando nadie nos ve … eso dice Serrat en una de sus mejores canciones. Eso decimos todos cuando los buenos tiempos parecen decir adiós desde lejos, eso dicen muchos cuando palpan la dureza rutinaria de la vida, donde el sol parece cobarde escondiéndose detrás de las nubes días tras día.Son esas pequeñas cosas las que recordamos de los momentos buenos, las que en los malos nos hacen seguir adelante. Son esas pequeñas cosas las que hacen que la larga vida merezca la pena, que luego se convierten en rutinas y cuando faltan es por lo que más lloramos, es lo que hace a una persona insustituible, esos pequeños detalles en los que se forja una amistad, en los que se fortalece y demuestra el amor, son esas pequeñas cosas que nos dejan los tiempos, esas rutinas pensadas con cariño, pequeñas, y tantas veces absurdas, tan absurdas que no somos capaces de repetirlas con otra persona, como si eso fuese una burla a la persona con la que la inauguramos, con la que establecimos esa rutina inolvidable.Son como el rastro del paso del tiempo, ese rastro que deja un animal pequeño a su paso, y que cuando este está lejos, solo queda el rastro que indica el camino por donde llegó al lugar donde está. Esa huella imborrable que queda en el camino son todas esas cosas que en el día en que se realizaron eran pequeñas pero que el tiempo y la constancia han dilatado hasta convertirlas en las máximas demostraciones de cariño, y a la vez las más inexplicables, Pequeñas, discretas y calladas, las más simples y a la vez las más costosas.Esas pequeñas cosas que son como cada una de las flores que cubren un campo verde, que es igualmente hermoso sin estas, pero las flores lo único que hacen es embellecer algo ya bello de por si, lo que hacen es que cada una individualmente constituyen algo muy pequeño, quizás desapercibida para cualquier mirada no demasiado despistada ni tampoco muy detallista, pero que su conjunto cambian por completo la belleza del campo pero siempre mejorándolo y haciéndolo más agradable.Así son las pequeñas cosas de la vida, cuya presencia hace que califiquemos unos tiempos como buenos, y hace que los malos se caractericen por la ausencia de estas. Las pequeñas cosas hacen que no sepamos decir porque echamos de menos a alguien cuya ausencia nos está dejando sin vida. Esas pequeñas cosas, que nos dejó un tiempo de rosas, nos hacen que lloremos cuando nadie nos ve.

DPM